Este espacioso lugar, único en su clase, está listo para recibir a sus huéspedes: una solución perfecta para familias o amigos, cuenta con una impresionante sala en la que destaca la piedra del Conero, con la que se construyó la casa en 1902, y con terrazas en las que es posible hacer barbacoas y cenar al aire libre. Se encuentra a solo 10 pasos del sendero que atraviesa el Monte Conero hasta Sirolo, y a otros 10 pasos de la parada de autobús hacia las playas de Portonovo. Sirolo y Numana están a 10 minutos en coche.