Lo que más nos gusta es recibirte, es esa sonrisa de bienvenida que surge de forma espontánea, ese café al llegar.
Nos encanta preguntarte cuál es el programa del día y ayudarte a descubrir los rincones más evocadores del Parque del Delta del Po.
Yo, Riccardo, soy guía del Parque y tan pronto como puedo me escapo con los invitados y contigo si quieres, para vivirlo.
Y Sarah, mi mujer, prepara todo lo demás, desde el desayuno que disfrutaréis al despertar, hasta el aperitivo con productos típicos y recetas refinadas para maridar con los vinos de arena.
Nos gusta mucho nuestro trabajo y está claro que como todo trabajo hay estándares que mantener con técnica y constancia, pero lo más lindo es esa relación que solo somos capaces de establecer con los huéspedes.
La relación entre los dueños del refugio en quienes confías para refrescarte después de un día de emociones, es aún más hermosa si se comparte.
Sarah y yo también viajamos mucho, estudiando y recopilando nuevas ideas que traducimos en nuestro negocio y nuestra familia, invirtiendo y creciendo año tras año.
Observa los colores y materiales porque los encontrarás en los ambientes que hemos diseñado para ti.
No espero que hagas una traducción analítica de todos los elementos que componen las habitaciones, sin embargo sentirás sus sugerencias al respirar la atmósfera.
Es importante disponer de aparcamiento privado, tomas USB, duchas extra grandes y minibares de diseño, pero todo ello sólo tiene valor si está en armonía con el entorno que te rodea.
Entonces te estamos esperando, será un placer recibirte en Comacchio.
Ricardo y Sarah