Affittamos un piso completamente renovado en el interior de un encantador pueblo antiguo, donde el tiempo parece haberse detenido para resaltar la tranquilidad. Podrán disfrutar de una de las vistas más espectaculares del lago de Como desde nuestra terraza. A lo largo de los bordes del pueblo, encontrarán varios caminos adecuados para hacer excursiones a pie o en bicicleta. En tan solo 10-15 minutos en coche, podrán llegar a las playas de Domaso, Gravedona y Dongo.